The hidden side of Notting Hill & Jamie's Italian
El sábado tenía una visita obligada al mercado de antigüedades de Notting Hill. Bueno, mejor dicho, a la tienda de Hirst Antiques, que descubrí recientemente a través de su facebook, y que se ha convertido en un pis pas en mi proveedora oficial de broches de Lea Stein, que ya conocéis a través de este post.
Después de mis compras, mi amiga y yo decidimos que ni por asomo nos apetecía mezclarlos con el gentío del mercado, así que, aprovechando que quería visitar una tienda de perros del barrio, nos perdimos por Notting Hill como dos londinenses más. En la zona, todas las casas son ideales (entre 5 y 11 millones de libras, por si os interesa saberlo), las tiendas y restaurantes una cucada, y hasta las floristerías tienen encanto. Hay mucha tranquilidad, y... en fin... que encantadas nos acoplaríamos a vivir en este famoso barrio.
Desde allí, nos fuimos de nuevo al centro, a darnos un atracón de sushi y seguir con los paseos. Primero fue un paseo por los Kensington Gardens (con diluvio incluido, que nos metió en un bus camino al centro) y luego, de postre, el Covent Graden, donde nos encontramos con otra amiga, y de ahí a pasear por el Soho. La lluvia nos había dado una tregua, y la temperatura era ideal para pasear... pero aún así no pudimos evitar el hacer una parada estratégica en un bar con un baño la mar de curioso.
La noche me tenía preparada una sorpresa ¡cena en el restaurante de Jamie Oliver! y yo que pensaba que estaba a tomar por saco... resulta que su italiano se encuentra en Greenwich, a un par de manzanas de casa de mi amiga. Me quedé gratamente sorprendida, tanto con la decoración (muy él: desarreglado pero chic), como con el menú. Mientras mi amiga eligió una imponente hamburguesa, yo decidí decantarme por algo más típico: cordero pascual. Mis Lamb Lollipops con polenta y salsa de yogur estaban imponentes... y el brownie con palomitas que las siguieron ni os explico. Relación calidad precio buena, servicio simpático and very helpful... sólo le hubiera faltado la presencia de Jamie. ¡Gran despedida para gran viaje!
Las fotografías no me pertenecen, aunque los collages sí. The images are not mine, but the collages are.
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